Desde que soy mamá muchas de vosotras me escribís para contarme vuestras inquietudes, pedir consejo o simplemente felicitarme con palabras bonitas y llenas de cariño. Por esa misma razón poco a poco el contenido del blog se enriquecerá con nuevos temas en los que los protagonistas serán ellos: nuestros preciosos bebés. Hoy os hablaré de como siento en el día que los corazones se apoderan del mundo; nos guste más o menos.
En este San Valentín me siento como una palomita a punto de explotar dentro de un microondas. ¡Una palomita de amor! Y es que no es para menos, mi corazón ahora late más fuerte y ama por dos, desde que Alejandro llegó a mi vida. Le cuento historias fantásticas, hago todo tipo de sonidos, invento personajes increíbles, canto como si fuera la cantante principal de un musical y no me canso de hacerlo porque mi bebé me mira con toda la atención del mundo; (he de confesarlo, eso me vuelve loca). Le abrazo con todas mis fuerzas, a veces incluso tengo ganas de apretarlo hasta decir basta y entonces, le lleno de besos para que ¡sienta todo mi amor!.
Cuando sonríe y sus mofletitos gorditos se hinchan como globos, siento que podría estar mirándole toda la vida sin aburrirme ni un solo segundo. ¡Lo sé! puede resultar algo empalagoso, no me lo tengáis en cuenta, soy mamá primeriza.
Me gusta que su último recuerdo del día sea mágico, para que cuando duerma pueda volar y soñar alto. Sé que veces necesita más de mi y espero que sepa perdonarme por tan solo una razón: daría mi vida por él e intento siempre mejorar por él y por mi, por los dos.
Cada mañana cuando me levanto, es un nuevo día de San Valentín para mi, y me propongo amarlo y ser la mejor mamá del mundo; solo que conforme pasa el día las «cosas de los mayores» como el trabajo, la casa, estudiar, hacer deporte, sacar tiempo para todos y para todo… ¡hace que me olvide de la gran pareja que hacemos tú y yo! Puedo mejorar, lo sé, pero si de algo estoy segura además de que no me van a dar un premio a la mejor madre del año, es que te amo con toda mi alma y con eso me basta para sentirme bien conmigo misma y contigo.
¡Feliz día de San Valentín a todas las mamás que este año aman por dos!
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Chupetes de TUTETE
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