IMG_7962

Hola de nuevo, hoy no os hablaré de moda ni de belleza; hoy os contaré como me preparé para ser mamá, ya que me escribís haciéndome miles de preguntas sobre mi embarazo y mi reciente maternidad; intentaré abarcar poco a poco en el blog todos los temas por los que me preguntáis. ¡Espero ayudaros!
Hace siete meses me convertí en la mamá de Alejandro y he de confesar que mi pequeño ha sido la razón de mimarme y cuidarme de manera especial. Desde el primer momento en el que supe que estaba embarazada comencé a pensar por dos y a leer, documentarme, asistir a charlas, talleres y prepararme como si fuese a correr mi propia maratón, la maratón de “dar vida”.
Mi interés por saber todo lo necesario para prepararme física y emocionalmente con el objetivo de ser una mami-fitness y de disfrutar de un estilo de vida saludable durante mi embarazo, me lleva a compartiros mi experiencia y algunos truquitos que os animen a cuidaros, y a dar importancia a vuestros hábitos durante el embarazo y la posterior recuperación.
Durante nueve meses he tenido días felices, días tristes, cambios hormonales, falta de apetito, hambre incontrolable, deseo, sueño, noches sin dormir, frío, calor, miedo, cambios físicos, ilusiones y un sinfín de emociones y sensaciones que me convirtieron en una noria con sus miles de subidas, bajadas y paradas. Y es que el embarazo y la maternidad a pesar de ser de las etapas más felices de la mujer, también son experiencias emocionales complicadas de las que nadie nos habla, ni prepara.

IMG_8035

Incluí en mis platos alimentos como: verduras ricas en ácido fólico, frutas con índice bajo glucémico, legumbres en dosis adecuadas, cereales integrales, proteínas cocinadas a la plancha o al vapor; y para completar mi alimentación y consumir las cantidades recomendadas por la OMS, elegí como complemento nutricional el micronizado en cápsulas de Juice Plus+ (más info AQUÍ). ¡Este complemento es 100% natural y biodisponible!

Soy muy glotona y tuve que dosificar las calorías vacías que provienen de golosinas, dulces industriales, comidas procesadas o grasas saturadas. Evité las comidas excesivamente grasas y presté atención a las porciones de hidratos de carbono de mis platos debido a su alto índice glucémico. En mi caso referente a la cafeína, la eliminé por completo, aunque está permitido tomar una dosis diaria.

Durante los cuatros primeros meses las náuseas se convirtieron en mis amigas inseparables durante el día y la noche. Mejoraron con medicación y todos los remedios caseros posibles, pero comer de manera frecuente comida ligera sin saltarme ninguna comida importante, fue la solución definitiva a la acidez y digestiones complicadas.
Comía cinco porciones de fruta y verdura al día, elegía alimentos de temporada para disfrutar del punto óptimo de sus beneficios, me mantenía bien hidratada, durante mi embarazo condimentaba mis platos con aceite de oliva virgen extra, sin olvidarme de dosificar la sal y usar edulcorantes naturales.

IMG_8053

IMG_8077

La optimización de mi alimentación no era suficiente, dedicaba dos horas a caminar y una hora de entrenamiento basado principalmente en el método pilates para embarazadas. ¡Por supuesto los estiramientos también son importantes para evitar lesiones y corregir posturas propias del embarazo que nos afectan en negativo!
En días alternos trabajaba 30 minutos el suelo pélvico con ejercicios específicos y rutinas de Kegel. Se basaban en contracciones musculares para fortalecer el suelo pélvico. Es sencillo, ayuda a facilitar el trabajo del parto y a prevenir diferentes problemas después del parto.
En las últimas semanas al finalizar el día dedicaba quince minutos a masajear la zona perineal, con el objetivo de disminuir riesgos durante el parto. Por último y no por ello menos importante en mi tiempo libre disfrutaba de actividades al aire libre; meditaba, leía y asistía a clases de preparación al parto y relajación, en la clínica médica Cemlosarcos (si vives en Córdoba y vas a ser mamá no dudes en hacerles una visita). De esta manera me sentía relajada, segura y feliz.

No quiero terminar este post sin hacer referencia a los cuidados estéticos. Mi rutina era continuar con una higiene e hidratación cuidada, exfoliaciones puntuales y tratamientos específicos que trataran las necesidades de mi piel en cada fase del embarazo.

Como veis la combinación de nutrición, deporte y descanso es muy importante para lograr bienestar durante el embarazo. El trabajo saludable realizado durante los nueves meses de gestación ha sido fundamental para mi óptima y pronta recuperación.
La etapa de la maternidad también precisa de ciertos cuidados especiales que nos ayudan a reencontrarnos con nosotras mismas de manera saludable en un tiempo en concreto. Sobre esto, os hablaré en el próximo post.

¿Y tú cómo te cuidas durante el embarazo? Me encantaría conocer vuestras experiencias, trucos y hábitos.
¡Hasta pronto chicas!

IMG_8028

All pictures by @luiscorcas

Thanks for reading!

Escribe un comentario